La noche del jueves intentaron robarse un vehículo y pertenencias pero por fortuna sonó la alarma y el sacristán de nombre David salió de su cuarto corriendo para ver quién o quiénes querían robar dicho automóvil.
Estacionado adentro estaba el vehículo de la marca Nissan, tipo March, cuatro puertas color blanco, con placas de circulación GZG-743-G, pero los desconocidos al escuchar la alarma huyeron del templo religioso.
El sacerdote Francisco Kabica Ome señaló que esa noche no le había puesto seguro al automóvil, y dentro de la unidad estaba una mochila color negro, conteniendo objetos valiosos.
En otras ocasiones de la iglesia San Nicolás de Tolentino han sido sustraídos varios objetos como un cirio, han sacado dinero de la alcancía, veladoras, una copa del cáliz, entre otras cosas.